Bicicleta: buena, ecológica y saludable
En los últimos tiempos la bicicleta fue ganando terreno y ocupando cada vez más las calles. Esto se debe a que es un medio de transporte económico, ecológico y saludable que se adapta a todas las edades. Ya sea con fines recreativos o de movilidad, constituye una opción sumamente válida para incorporar en la rutina diaria. De hecho, la OMS considera a andar rápido en bicicleta como un ejemplo de actividad física.
Entre algunos de sus beneficios se encuentran:
- Previene enfermedades: como toda actividad física, reduce el riesgo de infartos, beneficia músculos y huesos, previene la diabetes y ayuda a reducir el estrés.
- Ayuda a controlar el peso: dependiendo de la intensidad y cantidad de tiempo que se utilice ayuda a mantener un peso saludable.
- Disminuye la tensión arterial: la utilización regular de la bicicleta ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
- Es económica: utilizarla implica un ahorro en combustible, transporte público y en auto propio. Además, su mantenimiento es menos costoso.
- Disminuye la ansiedad: es una buena aliada para despejar la mente y reducir estrés.
- Cuida el medio ambiente: es un medio de transporte totalmente ecológico y amigable con el medio ambiente. Además no provoca ruido y no incrementa los niveles de monóxido y dióxido de carbono, hidrocarburos y otras partículas que favorecen la contaminación del aire.
Incorporar el uso de la bicicleta en la rutina diaria no sólo tiene beneficios a nivel individual sino también a nivel colectivo. Es la herramienta de cambio para una sociedad mejor.